Castillo de Rozafa, Shkodër

El Castillo de Rozafa, una majestuosa fortaleza que se alza sobre la ciudad de Shkodra en Albania, es un testimonio del rico tapiz histórico y cultural de la región. Situado en una colina rocosa en la confluencia de los ríos Buna y Drin, este castillo es uno de los más grandes e importantes de Albania y ofrece vistas panorámicas impresionantes de la ciudad y sus alrededores.

Construido por los ilirios en el siglo IV a.C., el Castillo de Rozafa ha sido testigo de numerosas batallas y ha pasado por las manos de romanos, bizantinos, venecianos y otomanos. A lo largo de los siglos, cada civilización ha dejado su huella en la arquitectura y la estructura del castillo, lo que lo convierte en un mosaico arquitectónico de diferentes estilos y épocas.

El nombre del castillo proviene de una leyenda local que cuenta la historia de Rozafa, una mujer que fue sacrificada para que las fortificaciones del castillo se mantuvieran firmes. Según la leyenda, Rozafa fue emparedada viva en las murallas del castillo con la promesa de que sus ojos, un pecho y un pie quedaran fuera del muro para poder cuidar a su hijo recién nacido.

Hoy en día, el Castillo de Rozafa es una de las atracciones turísticas más visitadas de Albania. Los visitantes pueden explorar las ruinas bien conservadas, que incluyen las murallas, torres y una pequeña capilla bizantina. Además, el museo del castillo ofrece una mirada detallada a la historia del sitio, con exhibiciones que muestran artefactos encontrados durante las excavaciones arqueológicas.

Abierto durante todo el año, el castillo es un lugar perfecto para los amantes de la historia y aquellos que buscan disfrutar de las vistas panorámicas de Shkodra y del lago Skadar. La fortaleza también es un lugar popular para eventos culturales y festivales locales, que añaden aún más encanto a este histórico sitio.