Torre de la Doncella, Bakú

La Torre de la Doncella, conocida como Qız Qalası en azerí, se erige como un enigmático monumento en el corazón de Bakú, Azerbaiyán. Este icónico edificio, con su base cilíndrica y muros de piedra maciza, es un símbolo emblemático de la ciudad y una pieza clave en su rica historia.

Con una historia que se remonta al siglo XII, aunque algunas teorías sugieren que sus cimientos pudieron haber sido establecidos en el siglo VII u VIII, la Torre de la Doncella ha sido testigo de incontables eventos a lo largo de los siglos. Su nombre en azerí, Qız Qalası, se traduce como "Torre de la Doncella", y está envuelto en leyendas locales. Una de las más populares cuenta la historia de una princesa que se lanzó desde la cima de la torre para escapar de un destino que no deseaba.

Con una altura de aproximadamente 29 metros y un diámetro de 16,5 metros, la estructura ha servido para diversos propósitos a lo largo de su existencia, incluyendo el de torre de defensa, faro y observatorio. Su arquitectura es un testimonio de la ingeniería de la era medieval en Azerbaiyán, y su diseño ha resistido los rigores del tiempo y los desafíos naturales.

La Torre de la Doncella no solo es una maravilla arquitectónica; también es un museo que ofrece a los visitantes una ventana al pasado de Bakú. En su interior, los visitantes pueden explorar exposiciones que narran la historia de la ciudad y la importancia de la torre en diferentes momentos históricos. Las vistas panorámicas de la ciudad y el Mar Caspio desde la cima son simplemente impresionantes y ofrecen un escenario perfecto para entender la posición estratégica de la torre.

Este monumento es un punto de referencia para los habitantes y visitantes de Bakú, y ha sido reconocido por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, subrayando su importancia cultural y arquitectónica. La Torre de la Doncella sigue siendo un lugar de celebración y orgullo nacional, y es una parada obligatoria para cualquier persona que visite la capital azerí.