Hechos sobre: Fulica cristata
La focha moruna, también conocida como focha cornuda, es un ave notable perteneciente a la familia de los rálidos, Rallidae. Su distribución abarca África y el sur de España, prefiriendo hábitats cercanos a lagos y estanques de agua dulce. Al construir su nido, esta focha demuestra creatividad elaborándolo con juncos secos, ubicándolo junto al agua o incluso flotando sobre ella. Generalmente, pone alrededor de ocho huevos, pero debido a su conducta algo agresiva hacia sus crías, solo unos pocos polluelos alcanzan la madurez.
En cuanto a su apariencia, la focha moruna es predominantemente negra con un distintivo escudo frontal blanco. Mide entre 38 y 45 cm de longitud y pesa entre 585 y 1,085 gramos. Sus dedos poseen una membrana parcial que facilita su natación. Los ejemplares juveniles presentan un plumaje más claro, con pechos blanquecinos y carecen del escudo facial característico de los adultos. Diferenciar la focha moruna de la focha común puede ser complicado, pero una distinción clave son los pequeños bultos rojos en su escudo facial que aparecen durante la temporada de reproducción.
Al igual que la focha común, la focha moruna es bastante territorial y agresiva, especialmente durante la época de reproducción. No es una gran voladora y prefiere correr sobre la superficie del agua para despegar. Esta ave es omnívora, alimentándose de una mezcla de pequeños animales y plantas acuáticas, con una particular predilección por las especies de Potamogeton.
Durante el apareamiento, la focha moruna emite una serie de llamadas distintivas que la diferencian de la focha común. Sus vocalizaciones incluyen un rápido "kerrre" un áspero "ka-haa" y un gruñido "oot oot". Estas características únicas, junto con su comportamiento y dieta, hacen de la focha moruna un miembro fascinante de la familia de los rálidos.