Delta del Okavango

El Delta del Okavango, situado en el corazón de Botswana, es un vasto y pintoresco humedal conocido por su extraordinaria biodiversidad y sus paisajes impresionantes. Este delta interior, que no desemboca en el mar, se forma donde el río Okavango se encuentra con una tectónica de placa en la cuenca del Kalahari, esparciendo sus aguas sobre un área de entre 6,000 y 15,000 kilómetros cuadrados.

Este oasis en medio de una región árida es hogar de una rica variedad de fauna, incluyendo grandes poblaciones de elefantes, búfalos, antílopes y depredadores como leones, leopardos y perros salvajes africanos. La biodiversidad del delta se complementa con más de 400 especies de aves, lo que lo convierte en un paraíso para los observadores de aves.

El Delta del Okavango fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2014, en reconocimiento a su ecosistema único y bien conservado. Es un destino turístico popular que ofrece actividades como safaris en mokoro (una canoa tradicional), paseos en bote, caminatas por la naturaleza y vuelos panorámicos.

La extraordinaria adaptación de las especies animales y vegetales a este entorno acuático hace del Delta del Okavango una maravilla natural. La inundación anual del delta, que ocurre entre junio y agosto, transforma la región en un laberinto de lagunas, canales y islas, creando un espectáculo impresionante que es esencial para la vida en la región.