Estadio de Maracaná, Río de Janeiro

El Estadio Maracanã, emblema del deporte en Río de Janeiro y joya del fútbol mundial, se alza como una catedral para los aficionados al balompié. Inaugurado en 1950 para albergar la Copa Mundial de la FIFA, este coloso deportivo se ha convertido en un símbolo de la pasión brasileña por el fútbol.

Con una capacidad original que llegó a albergar a cerca de 200,000 espectadores, el Maracanã fue testigo de la histórica final del Mundial de 1950, conocida como el "Maracanazo", donde Uruguay se coronó sorpresivamente ante Brasil. A lo largo de los años, el estadio ha sido renovado en varias ocasiones, adaptándose a las normativas de seguridad y confort modernas, reduciendo su aforo pero mejorando la experiencia del espectador.

El recinto ha sido escenario de eventos deportivos de gran envergadura, como los Juegos Panamericanos de 2007, la Copa Confederaciones 2013, la Copa del Mundo 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016. Además, ha acogido conciertos de estrellas internacionales, consolidándose como un lugar versátil para eventos de todo tipo.

El Maracanã no es solo un estadio, sino un museo vivo del deporte, donde los visitantes pueden recorrer los vestuarios, acceder al campo de juego y sentir la magnitud de su historia. Se ofrece una experiencia completa con tours guiados que permiten a los aficionados sumergirse en los momentos más emblemáticos del fútbol brasileño.