Basílica catedral de San Juan Bautista, San Juan de Terranova

La Basílica de San Juan Bautista es uno de los hitos arquitectónicos más impresionantes de la ciudad de St. John's, Canadá. Este majestuoso templo, dedicado al santo patrono de la ciudad, no sólo es un lugar de culto, sino también un punto de referencia que simboliza la historia y la espiritualidad de la comunidad.

Construida en estilo neogótico, la basílica se erige con sus dos torres gemelas que se imponen en el horizonte de la ciudad, siendo visible desde varios puntos de St. John's. Su construcción comenzó a mediados del siglo XIX y se concluyó en 1855, aunque la consagración oficial tuvo lugar años después, en 1894. Desde entonces, la Basílica de San Juan Bautista ha sido un centro de peregrinación religiosa y un símbolo de fe para los habitantes de Newfoundland y Labrador.

El interior de la basílica es igualmente impresionante, con vitrales de colores que narran historias bíblicas y la vida de San Juan Bautista, así como un altar mayor intrincadamente tallado que capta la atención de todos los visitantes. Además, la acústica del edificio es notable, lo que mejora la experiencia de las liturgias y los conciertos que se realizan en su interior.

La Basílica de San Juan Bautista no solo sirve como un lugar de oración, sino que también es un componente vital del patrimonio cultural de la ciudad. Fue designada como una Basílica Menor por el Papa Pío XI en 1955, y es un testimonio de la duradera presencia católica en la región.

Abierta a visitantes de todas las creencias, la basílica ofrece recorridos guiados que permiten a los turistas y peregrinos descubrir la rica historia y la arquitectura detallada del edificio. Además, su presencia en el centro de St. John's la convierte en un punto de partida ideal para explorar otros atractivos históricos y culturales de la ciudad.