Torre Willis, Chicago

La Willis Tower, antiguamente conocida como la Sears Tower, es una imponente silueta en el horizonte de Chicago, Estados Unidos. Con una altura de 442 metros, fue el rascacielos más alto del mundo cuando se completó en 1973, y hoy sigue siendo uno de los edificios más altos del planeta. La torre es un ícono arquitectónico de la ciudad y un punto de referencia ineludible para cualquier visitante.

Diseñada por el arquitecto Bruce Graham y el ingeniero estructural Fazlur Rahman Khan de la firma Skidmore, Owings & Merrill, la Willis Tower es una maravilla de la ingeniería, caracterizada por su innovador diseño de "tubos en tubos" que le permite soportar los fuertes vientos de Chicago. La construcción de este coloso de acero y vidrio tomó tres años y se finalizó en 1973.

La torre cuenta con 108 pisos y alberga oficinas, pero es más famosa por su plataforma de observación Skydeck, ubicada en el piso 103, a 412 metros de altura. Desde aquí, los visitantes pueden disfrutar de una vista panorámica de 360 grados de la ciudad y, en días despejados, observar hasta cuatro estados diferentes. Una de las atracciones más emocionantes del Skydeck es "The Ledge", una serie de balcones de vidrio que se extienden fuera del edificio, ofreciendo una experiencia única y vertiginosa sobre el vacío.

La Willis Tower es accesible al público y atrae a más de un millón de visitantes cada año. Abierta todos los días, ofrece la posibilidad de contemplar Chicago tanto de día como de noche, cuando la ciudad se ilumina creando un espectáculo de luces inolvidable.

Además de ser un atractivo turístico, la Willis Tower juega un papel crucial en la radiodifusión y las telecomunicaciones de la región, con numerosas antenas y mástiles instalados en su techo. Su presencia en la cultura popular es notable, apareciendo en películas, series de televisión y como tema en fotografías y postales.