Patriots Peace Memorial, Louisville

El Patriots Peace Memorial es un monumento situado en el este de Louisville, Kentucky, cerca de las orillas del río Ohio. En el año 2000, la jueza ejecutiva del condado, Rebecca Jackson, nombró un comité de militares retirados y ex militares locales, así como de familiares de militares locales de los Estados Unidos, para visualizar, concebir, financiar y erigir un monumento adecuado en honor de los patriotas caídos de todos los servicios militares. Con el generoso apoyo financiero de David y Betty Jones, así como de numerosas fundaciones locales, empresas, organizaciones de veteranos, familias, amigos y ciudadanos patriotas, el sueño se hizo realidad el Día de los Veteranos, el 11 de noviembre de 2002.

Se convocó un concurso internacional de diseño al que se presentaron más de 120 candidaturas. El diseño ganador fue obra de David D. Quillin Architecture, un pequeño estudio de arquitectura situado en Berlín. El monumento incluye una estructura elevada de cuatro lados con paredes de ladrillo. Cada vez que se inscribe un nuevo patriota caído, se retira un ladrillo de la pared y se sustituye por un cristal grabado personalizado que identifica a cada patriota, lo que significa nuestra pérdida. Este vacío en un muro que de otro modo sería sólido se convierte en un portal de luz que transforma el interior durante el día y se irradia hacia el exterior por la noche a través de cada nombre, como un recordatorio para celebrar diariamente la alegría de la libertad adquirida y salvaguardada por estos valientes hombres y mujeres. Cuando un visitante pasa por debajo de las cuatro paredes y asciende por los escalones piramidales, las paredes descienden visualmente hasta que, una vez en el mirador superior, el concurrido parque y la autopista cercanos quedan ocultos.

Siempre consciente de que la preparación militar es una tarea peligrosa, desde 2007 esta comunidad ha consagrado a 421 patriotas en este monumento.

El monumento honra a los patriotas caídos de todos los servicios de las fuerzas armadas que murieron durante un servicio honorable en el cumplimiento del deber, en condiciones distintas a las de una acción hostil declarada.

El énfasis ha sido encontrar y honrar a los veteranos con vínculos locales, que han muerto en servicio después de la Guerra de Vietnam. Todos los años, al mediodía del Día de los Caídos, se celebra en el lugar un servicio conmemorativo para los homenajeados.

Se requiere documentación oficial del servicio del miembro para certificar que un potencial homenajeado estaba sirviendo honorablemente en el momento de su muerte y que ésta no fue resultado de una mala conducta o por alguna circunstancia causada por el miembro del servicio. El fallecimiento puede haber ocurrido durante el tiempo de descanso regular o durante un permiso oficial. En el caso de los reservistas y del personal de la Guardia Nacional, el fallecimiento puede haber ocurrido mientras viajaba hacia o desde el servicio oficial o durante cualquier periodo de tiempo en el que el miembro del servicio estuviera en situación de pago.

A pesar de su diseño único, que incorpora un relieve grabado de una bandera estadounidense en su pared norte, el monumento carecía de una bandera estadounidense real que ondeara en homenaje silencioso a los que allí están consagrados. El 29 de mayo de 2006, Día de los Caídos, durante el servicio conmemorativo anual, se izó solemnemente una bandera estadounidense en homenaje a los honrados por el monumento.