St. Columba Church, Saint Paul

La Iglesia de San Columba es una iglesia católica romana en Saint Paul, Minnesota, Estados Unidos. La parroquia se formó en el barrio de Hamline-Midway en 1915. Tras el baby boom de mediados del siglo XX, la iglesia se expandió y necesitaba un nuevo edificio. El entonces párroco Michael Casey contrató al arquitecto Barry Byrne para diseñar y construir el edificio. Byrne vivía en Chicago y sus estudios formales terminaron en el noveno grado. Byrne trabajó bajo la dirección de Frank Lloyd Wright y participó en la Escuela de Arquitectura de la Pradera antes de orientarse posteriormente hacia la arquitectura expresionista. Byrne diseñó el edificio más tarde en su carrera.

La iglesia de 1949 tiene un diseño muy similar al de la iglesia de San Francisco Javier de Kansas City, Missouri, que también fue diseñada por Byrne. El párroco Michael Casey mandó construir el campanario para que pareciera una torre redonda irlandesa. El interior de la iglesia está construido a partir de dos círculos superpuestos. Esto crea un interior elíptico y un perfil superior que se asemeja a un pez. El pez es uno de los primeros símbolos del cristianismo y la construcción de la forma de la iglesia fue sin duda intencionada. Cabe destacar la cantidad de luz disponible en el interior del edificio. Hay más de 24 ventanas en forma de claraboya que dejan pasar la luz natural. La ligereza interior contrasta con el pesado exterior de hormigón. El interior de la iglesia cuenta con una cala iluminada cerca del techo. El crítico de arquitectura de las Ciudades Gemelas, Larry Millett, considera que el altar es pequeño para el gran interior del edificio. Vincent Michael también cree que el altar es insuficiente en comparación con el tamaño de la nave.

A diferencia de San Francisco Javier, las puertas de entrada son de metal en lugar de cristal pulido. Michael Vincent cree que sigue dando la impresión de vacío bajo el campanario. Para crear la forma interior, los muros exteriores son curvos. Están construidos con piedra caliza. Hay una gran cantidad de hormigón y se ha descrito como un "tour de force" del hormigón. Varios elementos de la iglesia se consideran únicos por su combinación. Millett considera que las ranuras del campanario, las cruces de granito incrustadas en los muros exteriores y el metal de las puertas de entrada constituyen una agrupación especial.

Millett describe el edificio como un "punto álgido en la arquitectura eclesiástica moderna de las Ciudades Gemelas" y señala que se aleja de muchas normas religiosas y arquitectónicas. Otras críticas señalan que tiene formas y órdenes que desafían las expectativas ortodoxas.