Kierikki

Kierikki es una zona situada en Yli-Ii junto al río Ii en Finlandia. Está a unos diez kilómetros al sureste y en dirección a Pudasjärvi desde el centro de Yli-Ii. Kierikki es también un apellido en Finlandia que se ha llegado a utilizar por el rápido del río Ii llamado Kierikki.

Kierikki es una de las zonas de exploración arqueológica más importantes de Finlandia. Las excavaciones empezaron en 1960 y aún continúan anualmente. Las investigaciones han cambiado significativamente la visión del norte de Finlandia en la Edad de Piedra. Los arqueólogos solían pensar que los habitantes de la Edad de Piedra eran nómadas, gente que cambiaba de residencia según las estaciones. En realidad, la gente vivía en grandes aldeas todo el año. Esto era posible gracias a las enormes capturas de pescado y focas que la gente obtenía en esa época. Los excedentes de pescado y foca también se utilizaban en el comercio. Las cabezas de flecha de sílex se comerciaban desde Rusia y los adornos de ámbar desde los países bálticos.

En las excavaciones de Kierikki, en el verano de 2007, se encontró un chicle de la Edad de Piedra hecho de corteza de abedul. El hallazgo fue reportado por la BBC.

Kierikki es también una subdivisión de la cerámica de peine típica tardía. La cerámica Kierikki se utilizó entre el 3500 y el 3100 a.C. y precedió a otro tipo de cerámica de amianto llamada pöljä. La cultura de la cerámica de peine finlandesa se denomina neolítica porque es comparable a las culturas neolíticas de otros lugares. Además de la cerámica, la cultura finlandesa de la cerámica de peine también incluye armas pulidas hechas de piedra, que forman parte de las culturas neolíticas. Una de las diferencias es la falta de agricultura en Finlandia en la Edad de Piedra.

Kierikki incluye el Centro de la Edad de Piedra de Kierikki, que es un destino popular con sus exposiciones arqueológicas y pueblos de la Edad de Piedra. También hay un hotel en la zona.

Todos los veranos se organizan excavaciones públicas en las que el público puede participar en los trabajos en Kierikki. En 2012, un niño de once años, Hedvig Hautala, encontró ámbar durante una de estas excavaciones.