Brownsea Castle, Poole

El castillo de Brownsea, también conocido históricamente como castillo de Branksea, fue originalmente un fuerte de dispositivos construido por Enrique VIII entre 1545 y 1547 para proteger el puerto de Poole en Dorset, Inglaterra, de la amenaza de un ataque francés. Situado en la isla de Brownsea, constaba de un blocao de piedra con una plataforma de cañones hexagonal. Estaba guarnecido por el pueblo local con seis soldados y armado con ocho piezas de artillería. El castillo siguió en uso después de que pasara el susto de la invasión original y fue ocupado por el Parlamento durante la Guerra Civil inglesa de la década de 1640. Sin embargo, a finales de siglo había caído en desuso.

En 1726 el castillo fue convertido en una residencia privada por William Benson, a pesar de las quejas de la ciudad de Poole. Benson y los posteriores propietarios ampliaron el blocao original para convertirlo en una casa de campo, y acondicionaron la isla circundante para crear jardines ornamentales y lagos. En el siglo XIX, los ocupantes del castillo siguieron construyendo, incluido el empresario Coronel William Waugh, que levantó varias ampliaciones de estilo jacobetano. Un grave incendio en 1896 destruyó el castillo, que fue restaurado por el comandante Kenneth Robert Balfour. El acaudalado corredor de bolsa Charles Van Raalte llevó un lujoso estilo de vida en Brownsea a principios del siglo XX, utilizándolo para albergar su colección de instrumentos musicales antiguos.

El castillo de Brownsea fue adquirido por Mary Bonham-Christie en 1927. Ella dejó que la propiedad se deteriorara y, cuando murió en 1961, estaba en muy mal estado. Entonces fue adquirido por el National Trust y arrendado a la John Lewis Partnership, que lo restauró durante muchos años. En el siglo XXI sigue siendo utilizado por la asociación como hotel corporativo para sus empleados y jubilados.