Arco de Galerio, Salónica

La Rotonda de Tesalónica, también conocida como el Templo de San Jorge, es un imponente monumento que se alza en el corazón de la ciudad de Tesalónica, Grecia. Esta estructura circular fue construida en el siglo IV d.C. como un mausoleo para el emperador romano Galerio, aunque nunca se utilizó para tal fin. A lo largo de los siglos, la Rotonda ha servido como templo pagano, iglesia cristiana y mezquita, reflejando la rica historia y diversidad cultural de la región.

Con un diámetro de 24,5 metros y muros que alcanzan los 6 metros de grosor, la Rotonda impresiona por su masiva arquitectura. Su cúpula, que se eleva a 30 metros de altura, fue una de las más grandes del mundo antiguo y sigue siendo una hazaña de la ingeniería. A pesar de los daños sufridos por terremotos a lo largo de los siglos, la estructura sigue en pie, simbolizando la resistencia de la ciudad ante las adversidades.

El interior de la Rotonda es igualmente fascinante, con vestigios de frescos y mosaicos que datan de diferentes períodos históricos. Durante su etapa como iglesia cristiana, se decoró con impresionantes mosaicos bizantinos, algunos de los cuales aún se pueden admirar hoy en día.

La Rotonda fue convertida en una mezquita durante la ocupación otomana de Grecia, y se le añadió un minarete, que todavía se encuentra junto al edificio, aunque ya no se utiliza para llamadas a la oración. Este minarete es uno de los pocos que se conservan en Grecia y añade un elemento distintivo al perfil de la Rotonda.

Actualmente, la Rotonda de Tesalónica es un sitio de patrimonio cultural protegido y ha sido nominada para ser incluida en la lista de Patrimonios de la Humanidad de la UNESCO. Es accesible al público y atrae tanto a turistas como a estudiosos que desean explorar su historia y arquitectura únicas.