Partenón, Atenas

El Partenón, emblema de Atenas y joya de la antigua Grecia, se erige majestuoso sobre la Acrópolis, dominando la silueta de la ciudad con su presencia milenaria. Este templo, dedicado a Atenea Parthenos, la diosa patrona de Atenas, es el máximo exponente de la arquitectura clásica griega y un símbolo perdurable de la democracia y la civilización occidental.

Construido en el siglo V a.C. durante el apogeo de la democracia ateniense bajo la dirección de Pericles, el Partenón fue diseñado por los arquitectos Ictinos y Calícrates, mientras que el escultor Fidias supervisó la creación de las esculturas. Compuesto principalmente por mármol pentélico, este templo dórico se ha mantenido a través de los siglos como testigo de la historia y transformaciones de Atenas.

A pesar de haber sufrido daños por conflictos, explosiones y saqueos a lo largo de los años, el Partenón sigue siendo un sitio de gran importancia arqueológica y cultural. Las metopas, los frisos y las estatuas que alguna vez adornaron su estructura, aunque hoy en día muchos se encuentran en museos como el Museo Británico de Londres y el Museo de la Acrópolis en Atenas, siguen impresionando por su belleza y detalle.

El Partenón también es conocido por sus refinamientos arquitectónicos, incluyendo la curvatura de sus estilóbato y columnas para corregir la ilusión óptica de la concavidad, y su uso de proporciones matemáticas ideales para la estética del templo.