Hechos sobre: Capra ibex
El íbice alpino, también conocido como el steinbock o bouquetin, es una especie fascinante de cabra salvaje nativa de los Alpes europeos. Estos animales son conocidos por su notable dimorfismo sexual, donde los machos son significativamente más grandes y poseedores de impresionantes cuernos curvados. Prosperan en terrenos escarpados y accidentados cerca de la línea de nieve y son criaturas sociales, formando grupos distintos según el género y la edad.
Durante la temporada de apareamiento, que dura aproximadamente seis semanas, los machos de íbice se involucran en dramáticas batallas con sus cuernos para ganar el favor de las hembras. Las hembras luego gestan a sus crías durante aproximadamente 167 días antes de dar a luz a uno o dos cabritos.
El íbice alpino estuvo al borde de la extinción en el siglo XIX debido a la caza excesiva y la caza furtiva. Afortunadamente, los exitosos esfuerzos de reintroducción han restaurado sus poblaciones en partes de su rango histórico. Notablemente, la población actual, que supera los 30,000 individuos, desciende de un grupo en el Parque Nacional Gran Paradiso en Italia. Aunque actualmente está catalogado como de "Preocupación Menor" por la UICN, la especie aún enfrenta una baja diversidad genética, lo que supone un riesgo de endogamia.
En cuanto a su apariencia, los íbices alpinos tienen una cabeza corta y ancha y un pelaje de color gris parduzco. Los grandes cuernos curvados hacia atrás de los machos son una característica destacada. Estas cabras son escaladoras excepcionales, navegando áreas rocosas por encima de la línea de nieve con facilidad. Su dieta es puramente herbívora, consistiendo en pastos, musgos, flores y hojas.
Los íbices alpinos son sociables y tienden a segregarse según el género y la edad, dependiendo de la estación. Durante los meses no reproductivos, los machos y las hembras viven en grupos separados.
La historia del íbice alpino no es solo una de supervivencia y recuperación, sino también una profundamente entrelazada con la cultura y la leyenda. Son símbolos icónicos en los Alpes, apareciendo en varios emblemas y logotipos a lo largo de la región. Una referencia cultural notable es la leyenda del Cuerno de Oro. Además, el análisis de ADN del famoso hombre de los hielos alpino, “Ötzi”, reveló que su última comida incluía carne de íbice.