Novo Brdo Fortress

La fortaleza de Novo Brdo es una fortaleza medieval serbia en Kosovo. Sus ruinas se encuentran cerca de la ciudad de Novo Brdo, a unos 40 kilómetros al este de Pristina. La fortaleza fue construida a finales del siglo XIII por el rey Esteban Uroš II Milutin de Serbia para proteger las minas de oro, plata, hierro y plomo que abundaban en la zona. Novo Brdo era famoso por su plata. Junto con los castillos de Prizren, a 12 kilómetros al suroeste, y Prilepac, a 13 kilómetros al sureste, que vigilan los caminos de acceso a la fortaleza, Novo Brdo contribuyó a formar un complejo defensivo que dominaba las lucrativas operaciones mineras. Novo Brdo tuvo su apogeo durante el Despotado Serbio, cuando era la zona minera más importante y la segunda ciudad más importante de Serbia. Un número importante de mineros sajones y una gran colonia de comerciantes ragusanos vivían en la ciudad, que estaba gobernada por un vojvoda, pero también por un gobernador, ya que era la sede de una unidad administrativa del Despotado.

La investigación arqueológica sistemática del sitio comenzó en 1952. En 1948, durante la época yugoslava, la fortaleza de Novo Brdo fue declarada Monumento Cultural de Excepcional Importancia. Cuando Kosovo declaró su independencia en 2008 fue designado temporalmente como sitio de protección especial y desde 2014 está en la base de datos del patrimonio cultural protegido del Ministerio de Cultura de Kosovo.