Cathedral Cove, Hahei

La Cueva de la Catedral, conocida localmente como Cathedral Cove, es una maravilla geográfica situada en la ciudad de Hahei, en la impresionante península de Coromandel, Nueva Zelanda. Este distintivo arco natural de piedra caliza, que separa dos playas idílicas, es una de las joyas naturales más fotografiadas y reconocibles del país.

El acceso a Cathedral Cove es una experiencia en sí misma, ya que requiere una caminata de aproximadamente 45 minutos a través de un sendero bien mantenido que serpentea entre bosques y ofrece vistas panorámicas del océano Pacífico. El trayecto, que es parte de la reserva marina de Te Whanganui-A-Hei, culmina en una bajada hacia la playa donde los visitantes son recibidos por la majestuosa entrada de la cueva.

La playa de Cathedral Cove es un lugar ideal para relajarse, nadar y practicar snorkel, especialmente en los meses de verano. La claridad de sus aguas y la abundancia de vida marina la convierten en un punto de interés para los amantes del mundo submarino. Además, es posible explorar las cuevas marinas cercanas y disfrutar de la impresionante formación rocosa conocida como Te Hoho.

Importante destacar es que no hay acceso vehicular directo a Cathedral Cove, lo que ayuda a preservar la tranquilidad y el carácter virgen del lugar. Los servicios básicos como baños y duchas están disponibles en el inicio del sendero, por lo que se recomienda a los visitantes llevar consigo todo lo necesario para su comodidad durante la estancia en la playa.

Para aquellos que buscan una experiencia más única, se ofrecen tours en kayak y paseos en barco que permiten una perspectiva diferente de la Cueva de la Catedral y la oportunidad de descubrir rincones menos accesibles de la costa.

Es fundamental respetar las normas de conservación del área, ya que Cathedral Cove es un tesoro natural protegido. Los turistas deben asegurarse de no dejar basura y evitar dañar la flora y fauna local.