Torre de Observación de Petřín, Praga

La Petřínská rozhledna, o Torre de Petřín, es una de las joyas arquitectónicas de Praga y un imán para los visitantes que buscan disfrutar de impresionantes vistas de la capital checa. Inspirada en la Torre Eiffel de París, esta estructura de acero fue construida en 1891 y se alza en la cima de la colina de Petřín, en el corazón de Praga.

Con una altura de 63,5 metros, la Petřínská rozhledna puede parecer modesta en comparación con su contraparte parisina, pero lo que le falta en tamaño lo compensa con un encanto distintivo y una vista panorámica que abarca toda la ciudad. Los visitantes pueden acceder a dos plataformas de observación: una inferior, a la que se llega por escaleras, y otra superior, alcanzable a través de un ascensor, ofreciendo una vista sin igual del casco histórico de Praga, el río Moldava y los numerosos puentes que lo cruzan.

Esta torre no solo es un punto de referencia para los entusiastas de la arquitectura y los amantes de las vistas panorámicas, sino que también es un testimonio del espíritu innovador que caracterizó el fin de siglo XIX. La Petřínská rozhledna, originalmente parte de la Exposición Jubilar, ha sobrevivido al paso del tiempo y sigue siendo un símbolo del ingenio técnico y cultural de la época.