Castillo Peleș, Sinaia

El Castillo de Peleș, situado en la pintoresca ciudad de Sinaia, Rumanía, es una joya arquitectónica que evoca la grandeza de la época real. Inaugurado en 1883, este palacio fue la residencia de verano de la familia real rumana y es un ejemplo sobresaliente de la arquitectura neorrenacentista. Rodeado por los majestuosos montes Cárpatos y con un diseño que combina estilos góticos, barrocos y tradicionales rumanos, el castillo es un testimonio de la riqueza cultural de Europa.

El castillo, convertido en museo, alberga una impresionante colección de arte, armaduras, tapices y mobiliario que pertenecieron a la realeza rumana. Sus 160 habitaciones están adornadas con la más exquisita madera tallada, vitrales y telas importadas de los rincones más distantes del mundo, lo que refleja la influencia global de la época.

Cada sala del castillo tiene su propia identidad, destacando la Sala de Honor, adornada con armas y armaduras, y la Sala de Teatro, donde la realeza disfrutaba de presentaciones privadas. Además, los jardines del castillo son un espectáculo en sí mismos, con fuentes ornamentales y senderos que invitan a los visitantes a explorar la belleza natural del entorno.

El Castillo de Peleș no es solo un museo, sino también un testimonio de la historia rumana, habiendo sido testigo de eventos clave que dieron forma al destino del país. Hoy en día, sigue siendo uno de los destinos turísticos más importantes de Rumanía, atrayendo a visitantes de todo el mundo que buscan sumergirse en la opulencia y la historia que sus muros conservan.