Hechos sobre: Accipiter tachiro
El azor africano es un ave de presa fascinante cuyo hábitat se encuentra en el continente africano. Pertenece al género Accipiter dentro de la familia Accipitridae. De tamaño medio a grande, estas aves son fácilmente identificables por sus llamativas partes dorsales grises y marcas rufo (marrón rojizo) en sus partes ventrales. Los machos suelen tener plumas grises más oscuras en comparación con las hembras, mientras que los juveniles presentan un color marrón con marcas prominentes. Su pico es negro, la cera (el área en la base del pico) es gris verdosa, sus ojos son amarillos, y sus patas y pies también son amarillos.
Una de las características distintivas del azor africano es su llamada única de clic, similar al sonido de dos piedras golpeándose entre sí. Realizan esta llamada cada 2-3 segundos, especialmente durante los vuelos de exhibición. Estas aves prosperan en una variedad de hábitats, desde bosques y matorrales hasta áreas ribereñas, plantaciones e incluso jardines. Se pueden encontrar en un vasto rango que se extiende desde Sudáfrica hasta Etiopía.
Los azores africanos son cazadores de emboscada hábiles. Se alimentan de aves, mamíferos y lagartos, y muestran un comportamiento territorial notable. Su cortejo implica vuelos ondulantes impresionantes acompañados de llamadas fuertes. En cuanto a la anidación, las hembras toman la iniciativa, construyendo nidos con palos y follaje en ramas generalmente alejadas del tronco del árbol. Suelen poner de 1 a 3 huevos, y ambos padres participan activamente en el cuidado de los polluelos hasta que están listos para dejar el nido a los 30-35 días de edad.
A pesar de su destreza, los azores africanos enfrentan amenazas de otras aves como el gavilán negro, el águila parda, el búho real del Cabo, el halcón borní y el halcón peregrino. En términos de taxonomía, el azor africano está estrechamente relacionado con el azor de pecho rojo y se divide en tres subespecies reconocidas que habitan en diferentes regiones de África.