Tiger Temple

El Templo del Tigre, conocido en Tailandia como Wat Pha Luang Ta Bua, fue un lugar que atrajo la atención internacional por su singular enfoque en la conservación de los tigres. Ubicado en la provincia de Kanchanaburi, este templo budista se hizo famoso por permitir a los visitantes interactuar de cerca con los tigres, una experiencia que generaba tanto asombro como controversia.

Fundado en 1994, el templo creció en popularidad debido a su inusual combinación de prácticas religiosas y cuidado de la vida silvestre. Los monjes del templo afirmaban que su misión era ofrecer un santuario para los tigres rescatados y promover la conciencia sobre la conservación de la especie. Los turistas podían tomar fotografías con los tigres y observar cómo los monjes cuidaban de estos grandes felinos.

Sin embargo, detrás de la fascinante experiencia que ofrecía el Templo del Tigre, surgieron acusaciones de maltrato animal y explotación. Investigaciones revelaron que los tigres podían estar sedados y que las condiciones de vida no eran adecuadas para su bienestar. Estas preocupaciones ambientales y éticas llevaron a las autoridades tailandesas a intervenir y, en 2016, cerrar el templo, rescatando a los tigres que allí vivían.