Monasterio de Sumela, Altındere Valley National Park

El Monasterio de Sumela, una Joya Incrustada en la Montaña

Anclado en la ladera de un acantilado, el Monasterio de Sumela emerge como un tesoro arquitectónico en el corazón del Parque Nacional Altındere, en Turquía. Este asombroso complejo monástico, que parece desafiar las leyes de la gravedad, ofrece a sus visitantes una mezcla única de historia, arte y espiritualidad, rodeado por el impresionante telón de fondo de los bosques del Ponto.

Fundado en el siglo IV por dos monjes atenienses, el Monasterio de Sumela es un sitio de peregrinación y un hito en la historia religiosa de la región. Se cree que el nombre "Sumela" proviene de la palabra griega "Melas", que significa "negro", en referencia a la Montaña Negra en la que se encuentra.

A lo largo de los siglos, el monasterio ha sido un testigo silencioso de innumerables eventos históricos, sobreviviendo a conquistas y cambios de imperios. Su ubicación estratégica y aislada le permitió funcionar como un importante centro de aprendizaje y arte religioso, especialmente conocido por sus impresionantes frescos que adornan las paredes interiores.

Para llegar al Monasterio de Sumela, los visitantes deben emprender un paseo por senderos forestales que serpentean a través del exuberante valle de Altındere. La vista de la estructura, incrustada en la roca a unos 1,200 metros sobre el nivel del mar, es un espectáculo en sí mismo.

Una vez en el sitio, se puede explorar la capilla principal, con su iconostasio tallado en madera y sus pinturas que datan de diferentes periodos, ofreciendo una cápsula del tiempo visual a través de la iconografía cristiana. Además, hay varias dependencias que servían como celdas para los monjes, cocinas y bibliotecas, todas repartidas en diferentes niveles del complejo.

El Monasterio de Sumela cerró sus puertas como un lugar de culto activo en 1923, pero continúa siendo un lugar de significado cultural y espiritual. Después de un extenso trabajo de restauración, reabrió al público, permitiendo que turistas y fieles por igual puedan maravillarse con su belleza y legado histórico.