Hechos sobre: Buteogallus coronatus
El águila del Chaco, también conocida como águila coronada solitaria, es una majestuosa pero amenazada ave de presa que habita en el este y centro de América del Sur. Este impresionante rapaz es fácilmente identificable por su plumaje mayormente gris, su distintiva cresta occipital y su llamativa cola con bandas en blanco y negro. Mientras que los adultos presentan este aspecto peculiar, las águilas jóvenes muestran un patrón de coloración diferente.
Estas águilas prosperan en bosques abiertos y marismas de países como Argentina, Brasil, Paraguay y Bolivia. Construyen grandes nidos de ramas, generalmente en lo alto de los árboles, y colocan solo un huevo por ciclo reproductivo.
En cuanto a su dieta, las águilas del Chaco son cazadoras expertas. Principalmente se alimentan de mamíferos como armadillos, zorrillos, comadrejas, roedores e incluso monos. Su menú también incluye reptiles, peces, corderos domésticos y, ocasionalmente, otras aves. Curiosamente, las águilas del Chaco son crepusculares, lo que significa que son más activas durante las horas del amanecer y el atardecer, y tienden a moverse más lentamente durante el día.
Lamentablemente, el águila del Chaco enfrenta serias amenazas, principalmente debido a la destrucción de su hábitat causada por la expansión agrícola y la ganadería. Su población es alarmantemente baja, con estimaciones que oscilan entre solo 375 y 1,500 individuos. La caza y la pérdida de hábitat son factores significativos que contribuyen a su declive.
Debido a estos desafíos, el águila del Chaco está clasificada como en peligro de extinción por BirdLife International y la Lista Roja de la UICN. Los esfuerzos de conservación son cruciales para proteger a esta notable ave y asegurar su supervivencia para las generaciones futuras.