Hechos sobre: Cercopithecus mona
El mono mona, un fascinante primate del Viejo Mundo, deambula por los bosques del África occidental, particularmente entre Ghana y Camerún. Curiosamente, también han encontrado un hogar en la isla caribeña de Granada, habiendo sido transportados allí en barcos de esclavos durante el siglo XVIII.
Estos monos son criaturas sociales que viven en grupos dentro de áreas boscosas. Su dieta consiste principalmente en frutas, pero también se alimentan de insectos y hojas. Característicamente, tienen un pelaje agutí marrón con una rabadilla blanca, cola y patas negras, y una cara azul-gris adornada con una franja oscura. Una característica única son sus bolsas en las mejillas, que utilizan para llevar comida.
En cuanto al tamaño, los machos típicamente tienen una longitud de cabeza y cuerpo que varía entre 410 y 630 mm, con colas que se extienden de 520 a 730 mm. Las hembras son ligeramente más pequeñas. Su hábitat natural se extiende desde el este de Ghana hasta el oeste de Camerún, y han sido introducidos en Granada y en Santo Tomé y Príncipe. Los monos mona son bastante adaptables, prosperando en varios tipos de bosques, especialmente cerca de ríos.
Estos monos generalmente forman grupos de aproximadamente doce individuos, liderados por un macho maduro. Pasan su tiempo buscando alimentos en el dosel del bosque, como frutas, flores, semillas e insectos. Conocidos por sus vocalizaciones, a menudo comparten su hábitat con otras especies de monos, como el mono mona de Lowe y el mono mona crestado.
A pesar de los desafíos que enfrentan, incluyendo la destrucción de su hábitat y la caza, la población del mono mona se mantiene relativamente estable. Sin embargo, debido a estas amenazas continuas, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) los ha clasificado como casi amenazados.