Hechos sobre: Leptodactylus fallax
Leptodactylus fallax, comúnmente conocido como el "pollo de montaña" o "rana gigante de zanja", es una especie en peligro crítico de extinción, nativa de las islas de Dominica y Montserrat en el Caribe. A lo largo de los años, su población ha disminuido drásticamente debido a la caza, la pérdida de hábitat, desastres naturales y, más recientemente, la enfermedad fúngica quitridiomicosis.
El pollo de montaña es una de las ranas más grandes del mundo, pudiendo llegar a pesar hasta 1 kilogramo y medir hasta 22 centímetros de longitud. Exhibe una variedad de colores y tiene características distintivas, como un pliegue único que va desde la cabeza hasta la ingle y ojos grandes y prominentes.
Estas ranas son terrestres y nocturnas, lo que significa que viven en tierra y están activas por la noche. Son depredadores acechadores con una dieta diversa que incluye insectos, milpiés, arañas y pequeños vertebrados. Durante la temporada de reproducción, los machos compiten por sitios de anidación y participan en el amplexo —un tipo de abrazo de apareamiento— con las hembras. La hembra luego pone huevos en un nido de espuma creado por el macho, y los renacuajos se alimentan de huevos especiales proporcionados por la hembra.
El pollo de montaña enfrenta numerosas amenazas, incluyendo la caza, enfermedades, destrucción de hábitat y depredadores introducidos. Para combatir estos desafíos, se han implementado diversos esfuerzos de conservación. Estos incluyen programas de cría en cautiverio en zoológicos, proyectos de reintroducción en sus hábitats nativos, prohibiciones de caza, campañas de concienciación pública y programas de monitoreo continuo.
Los programas de cría en cautiverio han tenido cierto éxito, particularmente en Europa, donde ranas criadas en cautiverio han sido reintroducidas en Montserrat. Sin embargo, la especie aún enfrenta riesgos significativos, principalmente debido a la amenaza continua de la quitridiomicosis y la destrucción del hábitat.
Los esfuerzos para salvar al pollo de montaña están en curso, pero el camino hacia la recuperación sigue plagado de desafíos. No obstante, la dedicación a preservar esta especie única y fascinante continúa inspirando esperanza para su futuro.