Iglesia de Nuestra Señora, Brujas

La Iglesia de Nuestra Señora en la pintoresca ciudad de Brujas, Bélgica, es un emblema de la arquitectura religiosa y un testigo silencioso de la fe y la historia que se entrelazan en las calles adoquinadas de esta urbe medieval. Con su impresionante torre que se eleva a 122 metros de altura, esta iglesia domina el horizonte de la ciudad y es la estructura más alta de Brujas y uno de los ejemplos más notables del arte gótico en el país.

Construida en el siglo XIII, la Iglesia de Nuestra Señora tardó más de dos siglos en completarse. Su arquitectura es una mezcla de estilos que reflejan las distintas etapas de su construcción, desde el gótico temprano hasta el gótico tardío. Sin embargo, es la torre, visible desde lejos y que sirve como un punto de referencia para los visitantes y lugareños, la que más destaca y es la segunda torre más alta de ladrillo en el mundo.

En su interior, la iglesia alberga una rica colección de arte religioso, pero ninguna pieza es tan famosa como la escultura de mármol de la Virgen con el Niño realizada por Miguel Ángel en el siglo XVI. Esta obra es una de las pocas esculturas del renombrado artista que se encuentra fuera de Italia y atrae a multitudes de visitantes cada año.

La Iglesia de Nuestra Señora también es el lugar de descanso de importantes figuras históricas, incluyendo a María de Borgoña y a Carlos el Temerario, cuyos elaborados mausoleos añaden un aire de solemnidad y grandeza al ya impresionante interior del templo.