Atelerix albiventris

El erizo de cuatro dedos es una encantadora criatura nativa de África Central y Oriental, presente en diversos países de dicha región. Estos erizos prefieren áreas de pastizales o bosques abiertos y tienden a evitar los bosques densos y los pantanos. Tienen un cuerpo de forma ovalada, patas cortas, un hocico alargado y ojos pequeños y brillantes. Como su nombre sugiere, tienen cuatro dedos en cada pata trasera, lo que los distingue de otras especies de erizos.

Estos erizos son solitarios y nocturnos, lo que significa que son más activos por la noche. Son bastante enérgicos y pueden recorrer largas distancias en busca de alimento. Su dieta incluye insectos, larvas, caracoles, arañas e incluso pequeños vertebrados. Curiosamente, tienen una alta tolerancia a las toxinas, lo que les permite consumir una amplia variedad de presas. Cuando se sienten amenazados, se enrollan en una bola apretada y erigen sus espinas para protegerse.

En cuanto a la reproducción, los erizos de cuatro dedos no siguen una temporada específica. Las hembras pueden ser fértiles durante todo el año, pero el apareamiento suele ocurrir durante la temporada de lluvias, cuando hay abundancia de alimentos. Cada año, una hembra da a luz a una sola camada, que puede variar de dos a diez crías. Los recién nacidos nacen ciegos e indefensos, pero rápidamente desarrollan sus espinas y pelaje dentro de los primeros días de vida.

En cautiverio, estos erizos son bastante populares en el comercio de mascotas exóticas. A menudo se crían por sus variaciones de color y temperamentos. Conocidos por su naturaleza enérgica, los erizos de cuatro dedos en cautiverio suelen tener ruedas para correr como ejercicio. Típicamente, viven de cuatro a seis años en cautiverio y no muestran los comportamientos de estivación o hibernación que se observan en la naturaleza. Debido a las regulaciones y prácticas de cría, la importación de erizos de cuatro dedos salvajes es rara, y a veces se necesitan permisos especiales para su posesión.