Hechos sobre: Chinchilla
Las chinchillas son encantadores roedores crepusculares originarios de las montañas de los Andes en América del Sur. Son un poco más grandes y robustas que las ardillas terrestres. Antiguamente, podían encontrarse en Bolivia, Perú, Argentina y Chile; sin embargo, actualmente las chinchillas salvajes solo habitan en Chile. Estos pequeños animales poseen el pelaje más denso de cualquier mamífero terrestre, una característica que influyó en su nombre, inspirado por el pueblo Chincha, que solía utilizar su piel. Desafortunadamente, su extremadamente suave pelaje las convirtió en objetivo de cazadores, reduciendo drásticamente su población en la naturaleza. Hoy en día, la mayoría de las chinchillas se crían en granjas, y las que tenemos como mascotas provienen de la especie Chinchilla lanigera.
Existen dos especies de chinchillas: Chinchilla chinchilla y Chinchilla lanigera. Lamentablemente, la Chinchilla chinchilla está al borde de la extinción. Estos animales viven en colonias llamadas manadas y establecen sus hogares en madrigueras o grietas en las rocas en áreas de gran altitud. Han desarrollado tácticas defensivas ingeniosas para evadir a los depredadores y tienen una dieta variada.
Ambas especies están catalogadas como En Peligro de Extinción debido a la drástica disminución de su población por la caza. Su lujoso pelaje las hizo populares en la industria peletera, contribuyendo a su estado de amenaza. Si estás considerando tener una como mascota, debes saber que necesitan mucho ejercicio, cuidado dental y baños de polvo regulares para mantener su pelaje limpio. Las chinchillas también se utilizan en investigaciones científicas, especialmente en estudios del sistema auditivo, y como modelos animales en varios experimentos.
En términos de salud, las chinchillas pueden sufrir fracturas, convulsiones y enfermedades infecciosas como la listeriosis y las infecciones respiratorias. También pueden experimentar problemas relacionados con el estrés, como el mordisqueo del pelaje, lo cual podría indicar que necesitan un cambio en su entorno. Los veterinarios a menudo las tratan con antibióticos y medicamentos para problemas digestivos.