Hechos sobre: Arctophoca galapagoensis
El lobo marino de las Galápagos, exclusivo de las Islas Galápagos en Ecuador, ostenta el título de la especie de otárido más pequeña. Los machos suelen ser más grandes y pesados que las hembras. Estos lobos marinos se congregan en colonias en playas rocosas para reproducirse desde mediados de agosto hasta mediados de noviembre. Las hembras son madres dedicadas, cuidando de una cría a la vez, y su atención es vital para la supervivencia de la misma.
Sin embargo, la rivalidad entre hermanos puede volverse intensa debido al prolongado período de lactancia y los recursos limitados, lo que conduce a altas tasas de mortalidad. Los eventos de El Niño empeoran la situación al causar escasez de alimentos, afectando significativamente la supervivencia de las crías. Durante la temporada de reproducción, los machos compiten ferozmente por territorios.
Los lobos marinos de las Galápagos se alimentan principalmente de peces, calamares y mariscos que se encuentran cerca de la costa. Sin embargo, durante los años de El Niño, la comida se vuelve escasa, lo que lleva a una mayor competencia y una mayor mortalidad de las crías. Aunque la depredación por tiburones y orcas es rara, existe.
La caza solía ser una gran amenaza, pero gracias a los esfuerzos de conservación, ha sido eliminada. Dicho esto, los cambios ambientales, el turismo, los derrames de petróleo y las colisiones con barcos aún representan riesgos significativos. Históricamente, la población ha sufrido debido a la caza furtiva y a los eventos de El Niño, pero se han implementado medidas de protección desde el siglo XIX. A pesar de estos desafíos pasados, la población se ha estabilizado desde 1983.