Hechos sobre: Oryctolagus cuniculus
El conejo europeo, también conocido como conejo común, es originario del suroeste de Europa y el noroeste de África. Sin embargo, ahora se encuentra en todo el mundo, excepto en la Antártida, a menudo causando daños a los ecosistemas locales en estas nuevas áreas. El declive de esta especie en sus hábitats nativos ha afectado negativamente a sus depredadores naturales, como el lince ibérico y el águila imperial ibérica.
Los conejos europeos son conocidos por sus hábitos de excavación y sus crías altriciales, lo que significa que sus crías nacen ciegas y sin pelo, dependiendo en gran medida de sus madres para sobrevivir. En la década de 1960, el naturalista Ronald Lockley y la Organización de Investigación Científica e Industrial del Commonwealth de Australia (CSIRO) realizaron investigaciones significativas sobre el comportamiento de los conejos salvajes.
En comparación con las liebres pardas y las liebres de montaña, los conejos europeos son más pequeños, generalmente miden unos 40 centímetros de largo y pesan entre 1.200 y 2.000 gramos. Presentan varios colores de pelaje y mudan su pelaje anualmente.
Estos conejos viven en grupos sociales dentro de madrigueras y son altamente territoriales. Tienen una jerarquía social, donde los machos dominantes (conejos) y las hembras dominantes (conejas) tienen prioridad en el acceso a los recursos. Los conejos dominantes a menudo tienen múltiples parejas, mientras que los conejos de menor estatus tienden a formar parejas monógamas. Las hembras son conocidas por ser ferozmente protectoras con sus crías.
Los conejos europeos se comunican a través de vocalizaciones y tienen una dieta diversa, que consiste principalmente en varias plantas. Como especie invasora, han sido introducidos en lugares como Australia, Nueva Zelanda y Chile, donde han causado problemas ecológicos significativos.
Los conejos europeos domesticados han sido criados por su carne y su pelaje, resultando en una variedad de razas. Su estado de conservación varía según la región: mientras sus poblaciones están disminuyendo en su Península Ibérica nativa, están prosperando en muchas áreas introducidas. A nivel mundial, el conejo europeo está clasificado como Casi Amenazado.