Hechos sobre: Branta leucopsis
El ganso barnacla es una ave llamativa del género Branta, caracterizada por su plumaje negro contrastado con distintivas marcas faciales blancas. Aunque se asemeja al ganso brant, está más estrechamente emparentado con el ganso risueño. El nombre "Branta" tiene raíces en el antiguo nórdico, mientras que su nombre científico proviene del griego antiguo.
Durante mucho tiempo, se creyó que el ganso barnacla y el ganso brant eran la misma especie. Incluso existía la creencia, algo peculiar, de que estos gansos nacían de percebes, lo que dio origen a su nombre. Este mito, que comenzó en el siglo XII, perduró hasta el siglo XVIII e incluso influyó en las prácticas culinarias durante la Cuaresma.
Los gansos barnacla son aves de tamaño mediano con un aspecto llamativo: plumaje blanco y negro, cara blanca y espalda de color gris plateado con barras blancas y negras. Se reproducen en islas árticas del Atlántico Norte y pasan los inviernos en lugares como Escocia, Irlanda, los Países Bajos y el Mar Báltico. Estos gansos enfrentan un desafío particular al anidar, pues a menudo eligen altos acantilados para proteger sus huevos de los depredadores. Una vez que los polluelos eclosionan, deben saltar de estos acantilados para reunirse con sus padres abajo, ¡un comienzo de vida audaz!
Los esfuerzos de conservación del ganso barnacla están respaldados por el Acuerdo sobre la Conservación de Aves Acuáticas Migratorias de África y Eurasia (AEWA). Afortunadamente, su población ha sido estable o incluso ha crecido en los últimos años, con éxito reproductivo observado en Suecia desde la década de 1970.
El ganso barnacla tiene una rica historia en el folclore. Las leyendas medievales afirmaban que nacían de trozos de madera flotante, lo que provocó debates sobre si podían ser consumidos durante los períodos de ayuno religioso. Este mito también jugó un papel en las discusiones sobre las leyes dietéticas judías durante la Edad Media.