Hechos sobre: Estela de los buitres
La Estela de los Buitres es un impresionante monumento antiguo de Mesopotamia, que data del período Dinástico Temprano III. Celebra la victoria de la ciudad-estado de Lagash sobre su rival, Umma. Nombrada por los buitres representados en una de sus escenas, esta estela, originalmente tallada en piedra caliza, se conserva ahora en siete fragmentos conocidos, todos ubicados en el Louvre.
Estos fragmentos fueron descubiertos por el arqueólogo francés Ernest de Sarzec a finales del siglo XIX en Tello (antigua Girsu), en el actual Irak. Fueron encontrados durante diversas campañas de excavación. La estela fue erigida por el rey Eannatum de Lagash para conmemorar su triunfo sobre Ush, el rey de Umma.
Si la estela estuviera completa, mediría aproximadamente 1,80 metros de altura y presentaría intrincados relieves en ambos lados. Este tipo de monumento era una manera común de celebrar victorias militares en el sur de Mesopotamia. Los dos lados de la estela representan tanto escenas mitológicas como históricas, mostrando dioses y batallas por igual.
En el lado mitológico, se puede ver al dios Ningirsu y a la diosa Ninhursag. El lado histórico, por su parte, ilustra a Eannatum liderando a sus soldados en la batalla, pisoteando a sus enemigos, con buitres llevándose cabezas decapitadas. Inscripciones en cuneiforme sumerio detallan el conflicto sobre tierras agrícolas entre Lagash y Umma, terminando con la victoria de Eannatum y un juramento del líder de Umma de no invadir el territorio de Lagash nuevamente.
La Estela de los Buitres es un hallazgo arqueológico invaluable que arroja luz sobre la vida política y religiosa de la antigua Mesopotamia. Resalta las intensas luchas de poder entre las ciudades-estado y el papel significativo de los dioses en la legitimación de los gobernantes.