Hechos sobre: La lapidación de san Esteban
"La Lapidación de San Esteban" es una pintura destacada del renombrado artista holandés Rembrandt. Completó esta obra en 1625, cuando solo tenía 19 años, marcándola como su primer trabajo firmado. Actualmente, se puede admirar esta temprana obra maestra en el Musée des Beaux-Arts de Lyon.
La pintura se inspira en el martirio de San Esteban, tal como se relata en Hechos 7 de la Biblia. Captura el angustioso momento en que el joven diácono está siendo apedreado hasta la muerte a las afueras de Jerusalén por una multitud de unas veinte personas. En esta escena intensa, Rembrandt retrata a Esteban pronunciando sus últimas palabras a Cristo, con una luz divina simbolizando la apertura de los cielos.
La composición de Rembrandt está influenciada por artistas como Caravaggio y Adam Elsheimer. La obra está inteligentemente dividida en dos zonas distintas por una línea diagonal que crea un impresionante efecto de claroscuro. En un lado, un hombre a caballo está envuelto en sombras, mientras que en el otro, Esteban y sus atacantes están bañados en luz. Entre la multitud, se puede distinguir a Saulo de Tarso en el fondo, sosteniendo los abrigos de aquellos que lanzan piedras.
Curiosamente, se han notado algunas inexactitudes menores en el dibujo. Por ejemplo, parece que Rembrandt podría haber incluido un autorretrato en el fondo. El historiador de arte John Durham incluso sugiere que Rembrandt se representó a sí mismo como un participante vacilante, quizás reflexionando sobre los trágicos eventos que se desarrollan ante él.