Hechos sobre: Oenanthe
Las collalbas son pequeños pájaros paseriformes que pertenecen al género Oenanthe. En el pasado, se pensó que formaban parte de la familia de los zorzales, Turdidae, pero actualmente se les clasifica comúnmente dentro de la familia Muscicapidae. Aunque predominan en el Viejo Mundo, la collalba gris ha logrado establecer poblaciones en partes de Canadá, Groenlandia y Alaska.
Curiosamente, el nombre "wheatear" no tiene conexión con el trigo ni con las orejas. En realidad, se deriva de un término popular que combina "white" (blanco) y "arse" (trasero), refiriéndose a la distintiva rabadilla blanca visible en la mayoría de las especies. El nombre del género Oenanthe proviene de las palabras griegas para "vino" y "flor", en referencia al regreso de la collalba gris a Grecia durante la época en que las vides comienzan a florecer.
El género Oenanthe fue introducido por el ornitólogo francés Louis Jean Pierre Vieillot en 1816. Las aves de este género suelen presentar patrones llamativos en blanco y negro o rojo y blanco. Además, exhiben un marcado dimorfismo sexual, lo que significa que los machos y las hembras se ven bastante diferentes, con los machos generalmente mostrando un plumaje más vívido.
Existen 29 especies dentro del género Oenanthe, incluida la conocida collalba gris. Estas aves son insectívoras y prefieren hábitats abiertos, a menudo secos. Usualmente anidan en grietas de rocas o madrigueras abandonadas. La collalba gris es especialmente notable por sus largas migraciones a África durante los meses de invierno.
El registro fósil de las collalbas incluye especies como Oenanthe kormosi del Mioceno Tardío de Hungría y Oenanthe pongraczi del Plioceno de Csarnota, Hungría. Los estudios moleculares han ayudado a refinar la taxonomía de este género, aclarando sus relaciones con géneros relacionados como Cercomela.