Hechos sobre: Casuarius
Los casuarios, pertenecientes al género Casuarius, son fascinantes aves ratites nativas de regiones como Nueva Guinea, el este de Nusa Tenggara, las Islas Molucas y el noreste de Australia. Entre ellos, el casuario del sur destaca como la especie más común, reconocida por ser la tercera ave más alta y la segunda más pesada del mundo. Estas aves son omnívoras y consumen principalmente frutas, aunque también ingieren otras materias vegetales, invertebrados e incluso pequeños vertebrados. Aunque generalmente son tímidos en presencia de humanos, los casuarios pueden ser peligrosos si se sienten amenazados, teniendo la capacidad de causar lesiones graves.
La taxonomía del casuario fue establecida por primera vez por el científico francés Mathurin Jacques Brisson en 1760. Pertenecen al grupo de las ratites, que incluye emúes, avestruces y kiwis. Existen tres especies vivas de casuarios, siendo el casuario del sur la más conocida. Su historia evolutiva está estrechamente ligada a la desintegración del antiguo supercontinente Gondwana hace unos 180 millones de años.
Los casuarios son típicamente tímidos y prefieren los bosques densos, con las hembras siendo más grandes y coloridas que los machos. Tienen características distintivas como un casco en sus cabezas, que varía en tamaño entre las especies. Estas aves juegan un papel vital en sus ecosistemas al ayudar con la dispersión y germinación de semillas, gracias a su dieta rica en frutas.
Sin embargo, el casuario del sur enfrenta amenazas, especialmente en Queensland, debido a la pérdida de hábitat, colisiones con vehículos, ataques de perros y otros factores. Las actividades humanas, como alimentar a los casuarios, también pueden ponerlos en peligro al atraerlos a áreas suburbanas. El Festival del Casuario, celebrado anualmente en Mission Beach, tiene como objetivo aumentar la conciencia y recaudar fondos para su conservación.
En cautiverio, los casuarios necesitan cuidados especiales para imitar su hábitat natural de selva tropical. Son solitarios y territoriales, lo que dificulta que vivan con otros de su especie. En algunas sociedades indígenas en Nueva Guinea, los casuarios han sido domesticados con fines ceremoniales y como fuente de alimento.
Los casuarios tienen una reputación algo peligrosa, con varios casos documentados de ataques a humanos y animales domésticos. Aunque los ataques fatales son poco comunes, los encuentros aún pueden resultar en lesiones graves. Estos incidentes sirven como recordatorio de que se debe acercar a estas impresionantes aves con precaución.