Hechos sobre: Kuku
Kuku, también conocido como kookoo, es un delicioso plato iraní que combina huevos batidos con una variedad de ingredientes. Puedes imaginarlo como una frittata, quiche, eggah o una tortilla abierta, pero con un toque distintivo en cuanto a la proporción de huevos y el tiempo de cocción. El kuku puede disfrutarse caliente o frío, lo cual lo convierte en un platillo versátil, adecuado como entrada, guarnición o incluso como plato principal. Generalmente se sirve con pan, yogur o ensalada. En el norte de Irán, se acostumbra consumirlo como una comida ligera a mediodía, acompañado de arroz o pan.
Si revisas libros de cocina históricos iraníes, encontrarás menciones de kuku elaborado con cilantro. Durante los períodos Safavid y Qajar, era comúnmente reconocido como un plato de acompañamiento. Una de las variantes más populares es el kuku de hierbas (kuku sabzi), que suele disfrutarse durante Nowruz (el Año Nuevo Persa) y Pascua. Tradicionalmente, el kuku se prepara friendo los ingredientes a fuego lento, aunque actualmente, es cada vez más común hornearlo.
Existen varias variantes deliciosas de kuku, entre ellas:
1. Kuku de Hierbas (Kuku Sabzi): La versión más común, hecha con huevos, puerros, perejil y, a veces, ajo. Es especialmente popular durante el Nowruz.
2. Kuku de Patata (Kuku Sibzamini): Similar a una tortilla española, esta versión incluye huevos, patatas y otros ingredientes sabrosos.
3. Kuku de Berenjena (Kuku-ye Bādenjān): Esta variante lleva berenjena machacada, huevos, perejil, nueces, cebollas y bayas de agracejo.
4. Kuku de Huevas (Ašbal Kuku): Una variante única de la región de Gilaki que incluye huevas (caviar).
5. Kuku de Yogur (Kuku-ye Mäst): Otra interesante variación que incorpora yogur.
En resumen, el kuku es un platillo versátil y lleno de sabor, capaz de adaptarse a diferentes ocasiones y preferencias culinarias.