Santa Maria delle Grazie, Arezzo

Santa Maria delle Grazie es una iglesia en Arezzo, Toscana, Italia central.

Se encuentra en el emplazamiento de un antiguo santuario con un manantial que, en la época etrusca-romana, estaba consagrado a Apolo. En la Edad Media se conocía como Fonte Tecta.

En 1425, San Bernardino de Siena intentó en vano destruirla. Expulsado de la ciudad, regresó en 1428 y, esta vez, consiguió que se sustituyera la fuente por un oratorio. Aquí, entre 1428 y 1431, Parri di Spinello, hijo de Spinello Aretino, pintó un fresco con la Virgen de la Misericordia, ahora insertado en el altar de mármol de Andrea Della Robbia. El altar representa, en el tímpano, una Virgen con el Niño entre dos ángeles; en los nichos están los santos Laurentinus, Pergentinus, Donatus y Bernardino, mientras que en el paliotto hay una Piedad.

Hacia 1490, el oratorio recibió un pórtico, diseñado por Benedetto da Maiano. La estructura se inspiró en el Ospedale degli Innocenti de Filippo Brunelleschi. En el lado más largo tiene siete arcadas con medallones, sobre un sótano con escalones.

La iglesia en sí fue construida entre 1435 y 1444, un edificio gótico tardío diseñado por Domenico del Fattore, con una sola nave con bóvedas de crucería y un corto ábside. Alberga un fresco con el Papa Sixto IV entronizado entre los cardenales Gonzaga y Piccolomini. En el lado derecho, se construyó una capilla dedicada a San Bernardino tras su muerte en 1444.