Porta alla Croce, Florencia

La Porta alla Croce es una antigua puerta de las Murallas de Florencia, situada al este del barrio de Santa Croce, en la plaza Beccaria de Florencia, región de la Toscana, Italia. La puerta formaba parte del cuarto conjunto de murallas de Florencia, construido a finales del siglo XIII.

La puerta se llamaba antiguamente Porta alla Croce al gorgo y también Porta Sant'Ambrogio. Se dice que el nombre puede derivar de la leyenda de que en este lugar San Miniato fue convertido en mártir.

La Puerta fue reformada en 1817-1818 bajo el reinado del Gran Duque Ferdinando III de Lorena, y en el luneto exterior tiene un fresco muy degradado que representa a la Virgen y los Santos, obra de Michele Tosini. En el pasado, justo fuera de esta puerta, era el lugar donde se realizaban las ejecuciones oficiales.

La renovación urbana de Florencia dirigida por Giuseppe Poggi derribó las murallas y dejó ésta y otras puertas aisladas en una rotonda.

Al sur de la puerta hay una placa que conmemora a los caídos en la Primera Guerra Mundial. Abajo hay una fuente en mal estado de conservación. El monumento fue dedicado en 1925, terminado en 1928, y en su día hubo dos emblemas fascistas. En la placa se lee: Caídos en la Guerra de Reivindicación y por la Grandeza de Italia. Una placa de 1310 describe el tamaño de las murallas y la puerta de Braccia Florentina. Finalmente una tercera placa dice que en 1817, Fernando III, Gran Duque de Toscana, padre de los ciudadanos. para asegurar una ganancia de las clases acomodadas en periodos de malas cosechas e impulsar el comercio, abrió con gran empeño de gasto, nuevas vías por las que conectar un camino de carruajes desde aquí hasta el valle superior del Arno, el Casentino y la Romaña y porque al mismo tiempo restauró esta puerta y la hizo más elegante y funcional, demoliendo edificios deteriorados que estaban empujados unos contra otros e igualando el nivel de entrada y salida. El óptimo y munificente príncipe de Florencia.