Santuario della Madonna della Guardia, San Giovanni Incarico

El santuario de Nostra Signora della Guardia, conocido simplemente como santuario de la Virgen de la Guardia, es una pequeña iglesia situada en el monte San Maurizio, en San Giovanni Incarico.

El complejo fue restaurado y ampliado en 1824 por el entonces prefecto de Nápoles, como recuerda una placa en el exterior de la propia iglesia. De hecho, la ciudad formaba parte del Reino de las Dos Sicilias en aquella época. En el lugar se encontraba una antigua iglesia dedicada a San Mauricio, cuya primera mención documentada data de 1043; posteriormente, el edificio religioso fue abandonado y se estableció en él un puesto de vigilancia, especialmente para proteger el territorio de las incursiones sarracenas. Es muy probable que durante este periodo se llevara una estatua de la Virgen a la pequeña iglesia, de ahí el título de "della Guardia" para proteger el territorio. Severamente dañado durante la Segunda Guerra Mundial, el santuario fue restaurado en 1948.

El santuario tiene una planta de cruz latina. El altar mayor está coronado por la hornacina que suele albergar la estatua de la Virgen, caracterizada, según la tradición española, con ropas de tela y cabellos reales, así como con joyas, que los devotos le han regalado a lo largo del tiempo. En la capilla de la derecha hay también una pequeña estatua de Nuestra Señora de Loreto. Detrás del santuario se encuentra lo que fue la casa del conserje, ahora utilizada como sede de la Pía Congregación de Nuestra Señora de la Guardia.

En el año 2015 se celebró un Jubileo Extraordinario en el Santuario para conmemorar el "milenio" de su fundación. De hecho, según algunas investigaciones, ya se tiene noticia de un lugar de culto en la montaña sobre San Giovanni Incarico poco después del año 1000. El año 2015 se eligió también en recuerdo de la solemne coronación de la estatua de la Virgen en 1915. La solemne celebración de apertura de la Puerta Santa, presidida por el Obispo de la Diócesis de Sora-Cassino-Aquino-Pontecorvo, Su Excelencia Monseñor Gerardo Antonazzo, contó con la presencia de miles de personas, también de los países vecinos y de fuera de ellos. Además, en septiembre, para la ceremonia de clausura del Jubileo Extraordinario, el Santuario recibió la visita del Card. Angelo Bagnasco, Presidente del C.E.I. y Arzobispo de Génova. De hecho, Génova alberga uno de los mayores y más famosos santuarios dedicados a Nuestra Señora de la Guardia, con el que está hermanado el Santuario de San Giovanni Incarico.

El Santuario también goza del privilegio de estar adscrito a la Archibasílica Papal de San Juan de Letrán, por lo que goza de las mismas indulgencias y privilegios concedidos a la Basílica de Letrán.