Palazzo baronale di Lizzanello, Lizzanello

También conocido como Palazzo Paladini, por el nombre de la familia feudal que lo erigió, tiene un origen en el siglo XV y fue construido originalmente como castillo. Modificada por primera vez en el siglo XVI, fue transformada en residencia señorial por Giovanni Paladini en el siglo XVII. A lo largo de los siglos siguientes sufrió enriquecimientos y modificaciones, sobre todo en el periodo neoclásico.

De la estructura original, queda una torre de piedra de Lecce en la parte trasera. La torre tiene una base troncocónica y es de forma cilíndrica. El interior alberga el escudo de los Paladini, que consiste en un escudo dividido en cuatro partes, con dos lirios blancos sobre un cuerpo rojo y dos lirios rojos sobre un cuerpo blanco: la placa está coronada por una cresta y se apoya en la cruz de Malta. La torre circular del palomar situada detrás del palacio también data del siglo XVII. El estilo arquitectónico renacentista tardío del palacio, probablemente construido con el asesoramiento de Gian Giacomo dell'Acaya, se desvirtuó a finales del siglo XIX con la transformación de la fachada y el jardín en estilo neoclásico. La fachada, que aún conserva su base escarpada, se caracteriza por una austera alineación de ventanales y un portal trapezoidal coronado por el escudo de la familia Lotti, últimos señores feudales de Lizzanello. No queda nada de las numerosas obras de arte que daban lujo al edificio, ya que fueron vendidas a particulares o trasladadas al palacio napolitano de los Lotti en Nápoles. Tampoco existen ya las capillas interiores de la Annunziata y de San Salvatore, que posteriormente recibieron el nombre de San Gregorio. Sin embargo, se conserva un molino de aceite subterráneo y una torre casamata con petriere y saettiere.