Hechos sobre: Haematopus moquini
El ostrero africano, también conocido como ostrero negro africano, es un ave llamativa que se puede avistar a lo largo de las costas e islas del sur de África. Con una población de más de 6,000 adultos, esta especie, considerada casi amenazada, se reproduce entre noviembre y abril. Denominado en honor al naturalista francés Alfred Moquin-Tandon, el nombre científico del ave es Haematopus moquini.
Características:
Estas aves son fáciles de identificar por su plumaje completamente negro, patas rojas brillantes y picos rojos robustos y anchos. Los machos y las hembras tienen un aspecto bastante similar, aunque las hembras son ligeramente más grandes y poseen picos algo más largos. Los jóvenes ostreros nacen con plumaje gris y desarrollan gradualmente las distintivas patas y pico rojos a medida que maduran. A menudo se pueden escuchar sus llamadas fuertes, que son similares a las de los ostreros euroasiáticos.
Hábitat:
Los ostreros africanos se encuentran a lo largo de las costas del continente y en las islas cercanas al sur de África, y ocasionalmente en Angola y Mozambique. Sus áreas de reproducción abarcan desde Namibia hasta Sudáfrica. Tienden a permanecer cerca de sus territorios en las costas rocosas, donde hacen sus nidos y encuentran alimento.
Dieta:
Estas aves son expertas en forrajear, alimentándose principalmente de moluscos como mejillones y lapas. También consumen poliquetos, insectos y, ocasionalmente, peces. Sus robustos picos les permiten abrir mejillones y acceder a otros bocados sabrosos. En cuanto a la nidificación, crean una simple depresión en guijarros, arena o grava cerca de la marca de la marea alta. El período de incubación es de aproximadamente 27 a 39 días, y los polluelos empluman después de unos 38 días. Las islas cercanas a la costa proporcionan terrenos de reproducción más seguros, protegiéndolos de depredadores y perturbaciones.
Estado de Conservación:
En diciembre de 2017, el ostrero africano fue clasificado como "Preocupación Menor" por la UICN. Gracias a los esfuerzos de las comunidades locales, su población ha ido en aumento. En Sudáfrica, han sido reclasificados a la categoría de Preocupación Menor. Programas de monitoreo a largo plazo en Sudáfrica y Namibia rastrean sus movimientos para apoyar los esfuerzos de conservación. Estas aves pueden vivir hasta 35 años, con algunas parejas permaneciendo juntas hasta 25 años. Sin embargo, aún enfrentan amenazas de depredadores, actividades humanas y otros factores que pueden afectar su supervivencia.