Hechos sobre: Myrmecocichla monticola
La collalba montana, también conocida como el chat de montaña, es un encantador pajarillo cantor que habita el suroeste de África. Puedes encontrar a estos insectívoros durante todo el año en las áreas rocosas y montañosas de Namibia, Botsuana, Sudáfrica y el sur de Angola.
Midiendo aproximadamente 18-20 cm de longitud, este pájaro es fácil de identificar gracias a su distintivo patrón de cola, patas negras y pico puntiagudo. Los machos presentan una variedad de plumajes, a menudo con una llamativa mancha blanca en el hombro y marcas únicas en la cola. Las hembras, en cambio, son mayormente de color marrón oscuro con algunos acentos blancos.
Las collalbas montanas son parejas fieles, permaneciendo con un solo compañero. Generalmente anidan en el suelo entre las rocas, donde ponen de 2 a 4 huevos blancos. Su dieta se compone principalmente de insectos y bayas, lo que los convierte en forrajeros bastante versátiles.
Curiosamente, se pensaba que estos pájaros formaban parte de la familia de los zorzales, pero posteriormente fueron reclasificados en la familia de los papamoscas del Viejo Mundo, Muscicapidae. Investigaciones genéticas recientes han afinado aún más su clasificación, ubicándolos en el género Myrmecocichla debido a sus similitudes genéticas con otras especies de chats.
Uno de los placeres de encontrarse con una collalba montana es escuchar su canto: un silbido melodioso intercalado con algunos chasquidos más ásperos. Es un sonido que realmente da vida a los paisajes rocosos del suroeste de África.