Hechos sobre: Aratinga solstitialis
El periquito del sol, también conocido como la cotorra del sol, es un loro extremadamente colorido, nativo de las regiones noreste de América del Sur. Estas aves sociales viven en bandadas y forman parejas monógamas de por vida. Su dieta en la naturaleza incluye una variedad de frutas, flores, bayas, semillas, nueces e insectos. Cuando se mantienen como mascotas, pueden vivir hasta 30 años.
El periquito del sol fue descrito por primera vez por Carl Linnaeus y pertenece al género Aratinga. Aunque es una especie monotípica, es parte de un grupo más amplio conocido como el complejo Aratinga solstitialis, que incluye otras tres especies. Desafortunadamente, el periquito del sol se considera actualmente en peligro de extinción debido a la destrucción de su hábitat y la captura para el comercio de mascotas.
En cuanto a su hábitat, estas aves coloridas se encuentran principalmente en el noreste de América del Sur, incluyendo Brasil, Guyana, Surinam y la Guayana Francesa. Prosperan en bosques tropicales, sabanas y regiones costeras.
Las cotorras del sol son conocidas por su comportamiento social. Se comunican a través de vocalizaciones y disfrutan de viajar en bandadas. Participan en varias actividades físicas como acicalarse, alimentarse y bañarse. En cautiverio, necesitan mucha estimulación mental e interacción social para mantenerse felices y saludables.
Su dieta en la naturaleza es bastante diversa, consistiendo en frutas, flores, semillas, nueces e insectos. Cuando se mantienen como mascotas, su dieta debe incluir una mezcla de frutas, verduras, semillas y suplementos nutricionales para garantizar que reciban una nutrición equilibrada.
Reproductivamente, las cotorras del sol son parejas devotas, con las hembras encargándose de la incubación y los machos protegiendo el nido. Típicamente, ponen de tres a cuatro huevos por nidada y cuidan de sus crías hasta que están listas para ser independientes.
La especie enfrenta amenazas debido a la pérdida de hábitat y la captura ilegal, pero las leyes que prohíben la importación de aves capturadas en la naturaleza han impulsado los programas de cría en cautiverio. Las cotorras del sol son mascotas populares debido a su plumaje vibrante y naturaleza juguetona. Sin embargo, requieren mucha atención, estimulación mental y cuidados adecuados para prosperar en un entorno doméstico.