Hechos sobre: Oryctolagus cuniculus domesticus
Los conejos, frecuentemente referidos como conejos domésticos, son una subespecie domesticada del conejo europeo. Estas criaturas adorables y afectuosas han sido valoradas como mascotas en los países occidentales desde el siglo XIX. Los machos se llaman conejos, las hembras conejas, y sus crías se denominan gazapos.
La historia de los conejos como animales de compañía se remonta a los romanos, quienes inicialmente los usaron como fuente de alimento. Durante la Edad Media, los conejos salvajes se mantenían para la caza. El proceso de domesticación fue gradual, abarcando muchos siglos.
En el siglo XIX, comenzaron a surgir exposiciones de conejos, lo que resultó en el desarrollo de varias razas con fines de exhibición. La Asociación Americana de Criadores de Conejos (ARBA), fundada en 1910, ahora supervisa la cría y las exhibiciones de conejos. Además de ser mascotas queridas, los conejos también se utilizan en trabajos de laboratorio para la producción de anticuerpos e investigación médica. De hecho, son la tercera mascota mamífera más popular en Gran Bretaña.
La genética de los conejos fascina a criadores, investigadores y a la industria cárnica por igual. El genoma del conejo ha sido secuenciado, revelando genes específicos que determinan el color y el patrón del pelaje. Como herbívoros, los conejos necesitan una dieta rica en heno, pellets y vegetales frescos. Su sistema digestivo único, que incluye un ciego agrandado, les permite ser fermentadores eficientes del intestino posterior.
Sin embargo, los conejos son propensos a varios problemas de salud, como estasis gastrointestinal, problemas dentales, infecciones respiratorias y enfermedades virales como la mixomatosis y la enfermedad hemorrágica del conejo. Garantizar su bienestar requiere esterilización/castración, vacunas y chequeos veterinarios regulares. También pueden sufrir de pododermatitis, tortícolis y miiasis.
Cuando se tienen como mascotas, los conejos pueden ser entrenados para usar una caja de arena y vivir en interiores, siempre que su espacio esté a prueba de conejos y se manejen correctamente. Debido a su naturaleza delicada, no son mascotas ideales para niños pequeños. A pesar de esto, los conejos son animales sociales que pueden formar fuertes lazos con los humanos. Son limpios e inteligentes, pero también pueden mostrar signos de agresión si no se socializan adecuadamente.
Históricamente, los conejos han sido criados por su carne, lana y piel desde tiempos antiguos. También se utilizan extensamente en la investigación científica, siendo el conejo blanco de Nueva Zelanda una raza común para pruebas. Además, el salto de conejos es un deporte popular en Europa, que muestra su destreza atlética.