Cave of Salemas, Loures

La Cueva de Salemas se encuentra cerca de la aldea de Lousa, en el municipio de Loures, en el Distrito de Lisboa, Portugal. Descubierta por los arqueólogos en la década de 1950, la cueva parece haber sido ocupada por los humanos como refugio temporal durante el Paleolítico Superior y utilizada como tumba durante el Neolítico.

Ubicada en un afloramiento calcáreo del Cretácico, la cueva está situada a unos 100 metros al norte del dolmen neolítico conocido como Anta do Alto da Toupeira. Es una cueva de solución y consiste en un pasaje de fisura sinuoso de unos 30 metros de largo y un metro de ancho. Aunque no es única en la zona, es la cueva más desarrollada, tanto en tamaño como en profundidad. Fue explorada por primera vez en septiembre de 1959 por L. Albuquerque e Castro y posteriormente excavada en su totalidad por un equipo del Servicio Geológico de Portugal, dirigido por O. de Veiga Ferreira, José Camarate Andrade França y Georges Zbyszewski, durante dos excavaciones en noviembre de 1959 y en octubre-diciembre de 1960.

Los niveles superiores excavados contenían materiales neolíticos, como objetos de cerámica, junto con huesos humanos consistentes con la existencia de una necrópolis y huesos de animales pequeños. Las relativamente pocas herramientas encontradas sugieren que la cueva nunca sirvió de vivienda permanente para los humanos. Los niveles inferiores contenían evidencias de herramientas líticas y óseas solutreanas y artefactos del Paleolítico Superior, junto con huesos de diversa fauna. Hay pruebas de que algunos de los niveles del Paleolítico fueron eliminados en parte de la cueva durante el Neolítico para dar paso a la necrópolis. Entre los huesos de animales descubiertos figuran los de osos pardos y osos de las cavernas; leopardos y linces ibéricos; hienas; lobos y caballos.

Los objetos recogidos se guardan en el Museo Geológico de Lisboa. La datación por carbono sitúa las fechas de los huesos humanos y de un diente del Paleolítico entre 25.000 y 20.000 años.