Hechos sobre: Aquila nipalensis
El águila esteparia, un majestuoso ave de presa de la familia Accipitridae, tiene una historia fascinante. Se pensó en un tiempo que estaba estrechamente relacionada con el águila parda, pero posteriormente se reconoció como una especie distinta debido a diferencias únicas en su apariencia física y anatomía.
Este imponente ave es fácilmente identificable por sus partes superiores de color marrón, sus plumas de vuelo negruzcas y su garganta pálida. Los ejemplares juveniles de águila esteparia pueden presentar variaciones en el color, lo que los hace algo impredecibles en cuanto a su apariencia. Una característica distintiva es su llamada, que se asemeja bastante al ladrido de un cuervo.
Las águilas esteparias tienen un amplio rango de reproducción, que se extiende desde Rumania hasta Mongolia. Durante el invierno, migran hacia climas más cálidos en África o India. Prosperan en hábitats abiertos y secos como desiertos, estepas y sabanas.
En cuanto a la anidación, el águila esteparia suele poner de 1 a 3 huevos en un nido de ramas construido en un árbol. Su dieta es bastante variada, consistiendo principalmente en carroña fresca. Sin embargo, no son comedores exigentes y también cazan pequeños mamíferos y aves, e incluso a veces roban comida de otros rapaces.
Lamentablemente, estas águilas enfrentan amenazas significativas debido al uso de diclofenaco, un medicamento veterinario. Las investigaciones han demostrado que el diclofenaco puede causar insuficiencia renal y envenenamiento en las águilas esteparias, similar a los efectos devastadores que tiene en los buitres. Debido a que estas águilas son carroñeras oportunistas, son particularmente vulnerables a este tipo de envenenamiento.
Culturalmente, el águila esteparia tiene un gran significado. Adorna la bandera de Kazajistán y ostenta el título de ave nacional de Egipto, apareciendo también en la bandera de este país.