Hechos sobre: Festividad de Qingming
El Festival de Qingming, conocido también como el Día de Barrer las Tumbas, es una tradición profundamente valorada por los chinos han y celebrada en diversas regiones de China. Se celebra el día 15 después del Equinoccio de Primavera. Durante este periodo, las familias se reúnen para visitar las tumbas de sus antepasados, limpiar los sitios, hacer ofrendas y rezar. Este ritual conmovedor, practicado por más de 2,500 años, fue oficialmente reconocido como día festivo en China continental en 2008. Las raíces del festival se remontan al Festival de la Comida Fría, que rendía homenaje a Jie Zitui, un noble célebre por su desinteresada dedicación a su señor.
Qingming trata de honrar a los difuntos. Las familias visitan las tumbas ancestrales, realizan rituales tradicionales y presentan ofrendas como muestra de respeto póstumo y piedad filial, un concepto profundamente arraigado en los valores confucianos. Además de estas actividades solemnes, la gente disfruta volando cometas, plantando árboles y participando en juegos tradicionales. Notablemente, en la cultura del té china, Qingming sirve como una fecha clave para distinguir los tiempos de recolección de los tés verdes.
El festival es sinónimo del agradable clima primaveral en China, lo que lo convierte en un momento perfecto para actividades al aire libre como juegos de tira y afloja, senderismo, vuelo de cometas y plantación de árboles. Qingming también tiene un importante significado espiritual y religioso, con conexiones a las enseñanzas budistas sobre la vida después de la muerte. Una de las representaciones más famosas del festival se encuentra en el pergamino de Qingming de Zhang Zeduan, una pintura que ilustra la vibrante celebración del festival en la antigua China. Qingming también ha sido inmortalizado en la literatura china, con numerosas menciones en poemas y relatos épicos.
Las comunidades chinas en el extranjero, especialmente en el sudeste asiático en países como Malasia y Singapur, continúan observando Qingming con gran reverencia. Estas comunidades mantienen tradiciones que se remontan a dinastías antiguas, organizando elaboradas reuniones familiares y banquetes para honrar a sus familiares y antepasados fallecidos. El festival es un momento para la reflexión, el respeto a los antepasados y las reuniones familiares, destacando la importancia perdurable de la piedad filial y el recuerdo en la cultura china.