Hechos sobre: Naja siamensis
La cobra escupidora indochina, también conocida como la cobra escupidora tailandesa, cobra escupidora siamesa o cobra escupidora blanco y negro, es una especie fascinante de serpiente que se encuentra en el sudeste asiático. Esta serpiente de tamaño medio presenta una variedad de colores, desde gris a marrón o negro, a menudo adornada con manchas o rayas blancas. Típicamente, estas serpientes crecen entre 0.9 y 1.2 metros de longitud, aunque algunos ejemplares excepcionales pueden alcanzar hasta 1.6 metros. Es importante no confundir esta especie con la cobra monocelada, a pesar de que comparten hábitats y tienen apariencias similares.
La cobra escupidora indochina se encuentra en países como Tailandia, Camboya, Vietnam y Laos. Habita en diversos entornos, incluidos las tierras bajas, colinas, llanuras, bosques y selvas. Estas serpientes son principalmente nocturnas y pueden exhibir diferentes comportamientos según la hora del día. Su dieta incluye roedores, sapos e incluso otras serpientes.
En cuanto a la reproducción, la cobra escupidora indochina es ovípara, lo que significa que las hembras ponen huevos, típicamente entre 13 y 19 a la vez. Su veneno es una mezcla potente de neurotoxinas postsinápticas y citotoxinas, que puede ser mortal para los seres humanos. Una mordedura de esta cobra puede causar dolor severo, hinchazón y daño tisular alrededor de la herida. Si el veneno entra en los ojos, puede provocar un dolor inmediato e intenso, y potencialmente causar ceguera temporal o permanente.
En términos de clasificación, esta especie fue confundida anteriormente con otras cobras. Sin embargo, estudios detallados en la década de 1990, que incluyeron análisis morfológicos y moleculares, confirmaron que se trata de una especie distinta.