Gazella gazella

La gacela de montaña, también conocida como la gacela de montaña de Palestina, es una especie fascinante que habita diversas regiones, incluyendo Israel, Cisjordania, los Altos del Golán, Jordania y Turquía. Estas gacelas son reconocidas por su notable dimorfismo sexual: los machos poseen cuernos más grandes y son, en general, de mayor tamaño en comparación con las hembras.

Las gacelas de montaña prefieren ambientes secos y desérticos y son criaturas diurnas, lo que significa que están activas durante el día. Además, son territoriales y suelen vivir en pequeños rebaños. Lamentablemente, su población está en declive debido a diversos factores.

En la naturaleza, las gacelas de montaña raramente superan los ocho años de vida; sin embargo, en cautiverio pueden vivir hasta 15 años. Estos animales son polígamos, y su reproducción ocurre en los primeros meses del invierno. Generalmente, una hembra da a luz a una cría al año. Los jóvenes son particularmente vulnerables a depredadores como zorros, chacales y lobos. En cuanto a su dieta, las gacelas de montaña se alimentan principalmente de pastos y pueden sobrevivir sin fuentes directas de agua, obteniendo humedad de suculentas y del rocío.

Históricamente, las gacelas de montaña han enfrentado amenazas significativas como la caza y las enfermedades. En la actualidad, siguen enfrentándose a peligros como la depredación, la caza furtiva, los accidentes de tráfico y la degradación del hábitat. Aunque existen protecciones legales, su aplicación es frecuentemente insuficiente, contribuyendo a la disminución de sus números. Los esfuerzos de conservación, incluyendo el establecimiento de reservas, son cruciales para estabilizar su población, pero aún se requiere mucho más para garantizar su supervivencia.

Existen diferentes subespecies de la gacela de montaña, como la gacela de montaña de Hatay, localizada en el norte de Siria y Turquía. Aunque anteriormente eran consideradas subespecies, investigaciones recientes sugieren que podrían ser especies separadas. La disminución dramática de su población a lo largo de los años resalta la necesidad urgente de implementar medidas de conservación efectivas para proteger a estos impresionantes animales.