Parque Beihai, Pekín

Beihai Park, un oasis de tranquilidad en el corazón de Beijing, es uno de los jardines imperiales más antiguos y mejor preservados de China. Con una historia que se remonta a más de mil años, este parque de 69 hectáreas ha sido testigo del paso de dinastías y la evolución de la capital china. Hoy en día, es un refugio para residentes y turistas que buscan escapar del bullicio de la ciudad.

El parque se caracteriza por su lago central, que ocupa más de la mitad de su superficie, y está rodeado de exquisitos jardines, templos, pabellones y corredores pintados con colores vivos. El lago Beihai, congelado en invierno y lleno de botes en verano, es el corazón del parque y ofrece una vista espectacular del horizonte de Beijing, incluido el distante perfil de la Ciudad Prohibida.

La Isla de Jade, accesible a través de un puente de mármol blanco, es uno de los puntos más destacados del parque. Allí se alza el imponente Templo Blanco, que se eleva a 35.9 metros y proporciona una panorámica impresionante de los alrededores. Los jardines que rodean el templo están meticulosamente cuidados, con una variedad de árboles, flores y plantas que reflejan la tradición hortícola china.

Beihai Park no es solo un lugar de belleza estética; también es un sitio de profunda significación cultural. Durante siglos, fue un lugar de retiro para emperadores y cortesanos, quienes buscaban la inspiración y la contemplación en sus paisajes serenos. Hoy, sus caminos y pabellones siguen siendo un testimonio de la filosofía paisajística china, donde cada piedra y cada cuerpo de agua están colocados para reflejar una armonía entre el hombre y la naturaleza.