Hechos sobre: Aotus lemurinus
El mono nocturno de vientre gris, conocido también como ducrocouli de patas grises o mono búho lemurino, es un encantador primate del Nuevo Mundo perteneciente a la familia Aotidae. Nativo de los exuberantes bosques tropicales y subtropicales de América del Sur, estos monos enfrentan actualmente amenazas debido a la caza, la destrucción de su hábitat y la captura para investigaciones farmacéuticas.
En cuanto a la clasificación, antes se reconocían cuatro subespecies del mono nocturno de vientre gris. Sin embargo, ahora tres de ellas son consideradas especies separadas. Curiosamente, el mono nocturno de Hershkovitz ya no se considera una especie distinta, sino un sinónimo de A. lemurinus.
En términos de apariencia, estos monos nocturnos son bastante distintivos. Tienen grandes ojos marrones expresivos y cejas blancas y tupidas, que les confieren una apariencia curiosa. Su pelaje es denso y lanoso, de tonos grises. Poseen extremidades delgadas, dedos largos y una cola que no es prensil. Los adultos pueden pesar hasta 1,3 kilogramos y no hay diferencias significativas en tamaño entre machos y hembras.
Los monos nocturnos de vientre gris prosperan tanto en áreas de bosques secos como húmedos, generalmente permaneciendo en el dosel. Prefieren la vegetación densa con muchas lianas para balancearse. Su dieta es variada, incluyendo frutas, vegetación, insectos, néctar y ocasionalmente pequeños mamíferos y aves.
Estos monos son más activos durante el crepúsculo y las noches de luna llena. Viven en grupos familiares que típicamente consisten en una pareja apareada y sus crías. Son conocidos por sus fuertes lazos monógamos, con los machos asumiendo la mayor parte de las tareas de cuidado. Se comunican utilizando una variedad de vocalizaciones y marcas olfativas para delimitar su territorio.
La reproducción de los monos nocturnos de vientre gris alcanza su pico al final de la temporada seca y en medio de la temporada húmeda. La gestación dura aproximadamente 133 días, generalmente resultando en un solo bebé. Los jóvenes alcanzan la madurez sexual entre los 2,5 y 3,5 años y luego abandonan su grupo familiar para encontrar una pareja y formar su propio grupo.